En un trágico suceso,
Oscar Ediberto "Erick" Vargas, de 65 años, fue encontrado sin vida en
su hogar ubicado en Calle Brown al 4365, en Barranqueras.
El hallazgo se produjo
en la mañana del 1 de diciembre y fue calificado como una muerte dudosa por las
autoridades, aunque anoche fuentes de la investigación adelantaron a NORTE que
la autopsia determinó que se trató de un accidente.
Según los informes,
Cinthia Analía Canteros, de 47 años, llegó a la vivienda con la intención de
entregar una copia de la llave a los vecinos a pedido de Lara Vargas, la hija
del fallecido, quien reside en España y no podía comunicarse con su padre.
Al no poder acceder a
la casa, Canteros solicitó ayuda policial para ingresar por el garaje, donde
encontraron el cuerpo de Vargas recostado en el suelo, semidesnudo y con
manchas que aparentaban ser sangre alrededor de su cabeza.
En el lugar se hallaron
varios objetos personales, incluyendo una billetera con documentos, un teléfono
celular marca Motorola y la llave de su automóvil Peugeot modelo 207 CC. La
escena fue asegurada por personal del Gabinete Científico del Poder Judicial,
que realizó tomas fotográficas y secuestró el teléfono y un trozo de hierro
encontrado en el lugar.
El médico policial
constató el fallecimiento y notificó una herida en la región occipital del
cráneo. El cuerpo fue trasladado al Instituto Médico Científico Forense (Imcif)
para realizar la autopsia correspondiente.
Las autoridades
continúan con las investigaciones, realizando entrevistas con vecinos y
allegados para esclarecer el suceso. Sin embargo, NORTE pudo saber anoche que
la autopsia determinó que la herida en la cabeza que tenía Vargas fue producto
de una caída del segundo piso. "Se trató de un accidente", indicó el
jefe de Investigaciones Complejas, Héctor Sosa.
FUENTE: DIARIO NORTE