La
identificación se logró gracias a pruebas de ADN que establecieron una
compatibilidad superior al 99,9% con el perfil genético de sus padres, Raúl
Giménez y Rosa Campos.
El informe
oficial fue comunicado a través del Radiograma N° 100-J-2024, firmado por el
Subcomisario Sebastián José Ramírez, jefe de la División de Búsqueda de
Personas Desaparecidas. Paralelamente, la Fiscalía N° 1 de Juan José Castelli,
a cargo de la Dra. Raquel Maldonado, confirmó los resultados mediante el Oficio
N° 560/24, dando por concluido el estado de búsqueda del joven.
La
desaparición de Salustiano había sido un caso de gran impacto social en la
comunidad de Nueva Pompeya, generando marchas y reclamos durante meses. En
julio, el hallazgo de restos óseos y ropa en el Paraje Nuevo Mundo, dentro de
la jurisdicción de Wichí El Pintado, encendió las alarmas. Las prendas fueron
reconocidas por su padre como las que llevaba el joven el día de su El
Instituto de Medicina y Ciencias Forenses (IMCIF) realizó los estudios de ADN
necesarios, que confirmaron que los huesos pertenecían al joven. Este resultado
cierra una etapa para la familia, que durante más de un año buscó respuestas,
pero también abre interrogantes sobre las circunstancias de su muerte. desaparición.
Salustiano
desapareció el 12 de febrero de 2023, un día que marcó el inicio de una extensa
búsqueda con la participación de fuerzas de seguridad, organismos judiciales y
miembros de la comunidad.
La
interrupción de los operativos en marzo de ese año generó tensiones en Misión
Nueva Pompeya, donde hubo violentos incidentes que incluyeron destrozos en la
comisaría, la fiscalía y el juzgado local.
Estos
disturbios, que dejaron un saldo de heridos, reflejaron el malestar de la
comunidad originaria ante la falta de respuestas inmediatas. Fue necesario un
esfuerzo coordinado de las autoridades gubernamentales y judiciales para calmar
el clima de tensión y retomar las tareas de búsqueda.
La
comunidad espera justicia por el joven Salustiano.